Triatlon de Baracaldo
Sprint 0,75/20/5
Tras un verano de descanso con vacaciones en bicicleta y mucha montaña, y tras una semana de empezar suave y con pereza a entrenar, llegué a Barakaldo con el gusano de la competición y la incertidumbre sobre cómo me iba a encontrar.
Amaneció un día malísimo, con unos chaparrones brutales. El circuito de bici de Barakaldo es urbano, con un recorrido de tres vueltas por el Mega Park. Con innumerables rotondas y pasos de cebra. En definitiva, una trampa para ciclistas o triatletas despistados.
La organización del triatlón ha sido otro de los puntos débiles del día. No por falta de voluntarios, sino por la indiferencia de algunos jueces y la nula capacidad organizativa de la Policía Municipal. (ahora os cuento por qué)
La salida era en la Dársena de Portu, con 150 tíos esperando en la rampa de acceso. Tras una breve explicación y mandar salir a todo el mundo del agua, dan la salida desde la rampa. Total, un desastre, la gente lanzándose a la espalda del de delante y casi un minuto de diferencia entre que sale el primero y el último. Podéis ver la foto. Yo soy el que se lanza hacia la izquierda en un intento de ahorrar algo de tiempo.
Salí del agua en 35º posición, mejor de lo normal pero lejísimos de los primeros. El tiempo es engañoso porque tardamos mucho en salir, pero aun así, demuestra la mejora que necesito en este deporte para poder competir.
Eso sí, cogí la bici fresco, y salí a tope con Jabo para delante. Para llegar al circuito teníamos que ir por una calle en la que sólo cabía un coche y que, inexplicablemente, no estaba cortada al tráfico. Un coche intentaba incorporarse a la calzada y al coche de los Municipales que iba delante nuestro controlando la carrera, no se le ocurrió otra cosa que parar al lado para que no saliese. Total, no cabíamos ni por la derecha ni por la izquierda. Esto unido al agua y a que no lo vi hasta que no estaba encima, hicieron que no pudiera frenar a tiempo y me fuese al suelo. Afortunadamente no me hice demasiado. Un golpe fuerte en el brazo pero sin roturas, y una herida en la mano y rozaduras en la pierna. Lo peor el susto que se te queda y que te rompe la dinámica del esfuerzo.
La primera vuelta intenté coger al grupo de Jabo en el que había rodado, y lo conseguí sin demasiada dificultad. En la segunda vuelta, me descolgué en una rotonda porque no me atrevía a trazar muy rápido (me parecía que la bici temblaba), y se me escaparon un par de Ezkerraldeas que había en el grupo. No tuve las ganas de salir a por ellos, así que finalmente me quedé. Llegó Jabo con Maider por detrás y tiramos de ella para dejarla delante en el sector de carrera a pie.
En la carrera encontré las mejores sensaciones. Sin ir a tope, comencé con un ritmo fluido, y lo mantuve muy bien, cogiendo a los Ezkerraldeas y a unos cuantos más, y permitiéndome el lujo de sprintar un poquito al final. Posición 21º, que no está mal para la forma física que tenía. A 9 minutos pero con 5 y pico perdidos en el agua. Si sumamos la caída y que no iba en bici, la conclusión no es del todo mala.
Ahora, a seguir con tranquilidad la preparación y a preparar la Media Maratón nocturna de Bilbao
Sprint 0,75/20/5
Tras un verano de descanso con vacaciones en bicicleta y mucha montaña, y tras una semana de empezar suave y con pereza a entrenar, llegué a Barakaldo con el gusano de la competición y la incertidumbre sobre cómo me iba a encontrar.
Amaneció un día malísimo, con unos chaparrones brutales. El circuito de bici de Barakaldo es urbano, con un recorrido de tres vueltas por el Mega Park. Con innumerables rotondas y pasos de cebra. En definitiva, una trampa para ciclistas o triatletas despistados.
La organización del triatlón ha sido otro de los puntos débiles del día. No por falta de voluntarios, sino por la indiferencia de algunos jueces y la nula capacidad organizativa de la Policía Municipal. (ahora os cuento por qué)
La salida era en la Dársena de Portu, con 150 tíos esperando en la rampa de acceso. Tras una breve explicación y mandar salir a todo el mundo del agua, dan la salida desde la rampa. Total, un desastre, la gente lanzándose a la espalda del de delante y casi un minuto de diferencia entre que sale el primero y el último. Podéis ver la foto. Yo soy el que se lanza hacia la izquierda en un intento de ahorrar algo de tiempo.
Salí del agua en 35º posición, mejor de lo normal pero lejísimos de los primeros. El tiempo es engañoso porque tardamos mucho en salir, pero aun así, demuestra la mejora que necesito en este deporte para poder competir.
Eso sí, cogí la bici fresco, y salí a tope con Jabo para delante. Para llegar al circuito teníamos que ir por una calle en la que sólo cabía un coche y que, inexplicablemente, no estaba cortada al tráfico. Un coche intentaba incorporarse a la calzada y al coche de los Municipales que iba delante nuestro controlando la carrera, no se le ocurrió otra cosa que parar al lado para que no saliese. Total, no cabíamos ni por la derecha ni por la izquierda. Esto unido al agua y a que no lo vi hasta que no estaba encima, hicieron que no pudiera frenar a tiempo y me fuese al suelo. Afortunadamente no me hice demasiado. Un golpe fuerte en el brazo pero sin roturas, y una herida en la mano y rozaduras en la pierna. Lo peor el susto que se te queda y que te rompe la dinámica del esfuerzo.
La primera vuelta intenté coger al grupo de Jabo en el que había rodado, y lo conseguí sin demasiada dificultad. En la segunda vuelta, me descolgué en una rotonda porque no me atrevía a trazar muy rápido (me parecía que la bici temblaba), y se me escaparon un par de Ezkerraldeas que había en el grupo. No tuve las ganas de salir a por ellos, así que finalmente me quedé. Llegó Jabo con Maider por detrás y tiramos de ella para dejarla delante en el sector de carrera a pie.
En la carrera encontré las mejores sensaciones. Sin ir a tope, comencé con un ritmo fluido, y lo mantuve muy bien, cogiendo a los Ezkerraldeas y a unos cuantos más, y permitiéndome el lujo de sprintar un poquito al final. Posición 21º, que no está mal para la forma física que tenía. A 9 minutos pero con 5 y pico perdidos en el agua. Si sumamos la caída y que no iba en bici, la conclusión no es del todo mala.
Ahora, a seguir con tranquilidad la preparación y a preparar la Media Maratón nocturna de Bilbao
